Bernadeta

'Ironing' - Jo Johnston

Un día mi chico me dijo:

– A ti te encanta que los tíos te tengan miedo, no?

– No sé, nunca he pensado en ello.

Entonces lo pensé, analicé y después de unos días le respondí:

– Pues no. No me encanta que los hombres me tengan miedo, pero los dziados si. A los dziados los aplasto cuando pueda y quiero que sientan mi respiración en su nuca incluso cuando no estoy cerca, ya know what im sayin?!

Siempre me he definido por acciones y por trabajo. Ni mal, ni bien, es así. Soy una persona que sabe de negocios y con facilidad gana confianza de clientes. La verdad es que, como decimos en polaco, soy tiburona en el mundo de negocios. Lo digo para completar la historia, no vengo ni de entorno de emprendedor@s ni de mujeres tiburonas. No, no ha sido facil, ahora si que lo es. Pero ya está llegando el momento en el que tengo que explicar quienes son los dziados y porque deberían tener miedo. Y porque sus tiempos se acaban porque no hay otra.

Pero antes quiero confirmar que claro, si todo el mundo consistiría solo en depredadores, no sorbreviviríamos. Se trata de sacar las depredadoras de la sombra. Me afascinan las leonas, fuertes, cazando y protegiendo a sus hijos, pero luego como seguro que habéis visto en los documentales, viene el león  y se va a comer la cena el primero, aunque a pesar de pasar el día tumbado y descansando no hizo nada. Quiero leonas mujeres que se pongan a comer primeras! Y solas si les apetece.

Los dziados son hombres que tienen o creen tener poder y conocimiento en las empresas, universidades, gobiernos, asociaciones y otros entornos públicos y privados. La mayoría es, como se diría, „de otra época”, pero siguen en el trono y asfixian a otras personas. Ven los cambios en la sociedad pero temen la evolución, hasta el último momento creeran que las mujeres no. Las mujeres no. No, las mujeres no!

Esto es que yo hago: yo si que escucho a los dziados, los miro intensamente, los analizo, mi mente va apuntando todas sus debilidades. Voy cogiendo fuerza, día a día. En momento adecuado, con precision de cirujana, con toda la paciencia heredada de bisabuelas, abuelas, tías, vecinas, madres, escritoras, amigas, con rapidez safariana utilizotodos los elementos agregados para atacar. ¿Sabéis qué significa para los dziados que su autoridad baje entre los trabajadores? ¿Que vean que esto es inevitable? Que vean que NO saben? ¿Alguna vez habéis sido un@ líder al que no sigue nadie? Porque lo bonito en la evolución es que la gente quiere seguir a la leona. A los dziados se los ha seguido por costumbre y con poco entusiasmo.

No quiero que me den más puntos a la entrada de universidad politécnica porque soy mujer. No quiero perder tiempo en hablar sobre pelo en axilas o piernas de mujer, no quiero permiso de los bodypositivistas para sacarme fotos con celulitis o sin el en la playa. Quiero saber historia de nuestras abuelas para incendiar rabia y fuerza, no profundizar en el victimismo. Quiero sacar más depredadoras, leonas o tiburonas de la sombra. Sé que están allí. No quiero que afirmemos otra vez que las pobres mujeres repiten los patrones malos cuando deciden parir e olvidan sobre sus necesidades, retroceden y matan sus cerebros con canciones para niños y no deberíamos criticarlas. Entonces tampoco deberiamos juzgar a los hombres por repetir patrones de no poder saber poner la lavadora o hacer la compra? A la mierda con patrones, a criticarlos, a romperlos! Los encuentros de afirmaciones, joga en el bosque y apoyos mutosos femininos me parecen muy buenos, sanos, nutrientes. Pero quiero que nos miremos en los ojos y hablemos de lo que hacemos bien y lo que hacemos mal.

Bernadeta